Si Navidad es renacer…
Renazco cada vez que me miro en el espejo y voy notando cómo el tiempo va dejando sus huellas, despacito pero sin lástima.
Entonces renazco y asumo mi nueva edad cada día.
Renazco cuando me encuentro pensando, imaginando el mañana y recordando el ayer, entonces me descubro en este preciso momento…ya no soy lo que era.
Y no dejo de aprender.
Renacer es poder dejar atrás lo que creía imprescindible, mis opacas dependencias, mis aditivos hábitos, mis viejas costumbres…y me sorprendo al dejarlos, sintiendo que no eran tan necesarios después de todo.
Enfrento nuevos desafíos y eso también es volver a nacer.
Poder asomarme a caminos nuevos y deslumbrarme con la posibilidad de optar.
Digo adiós a lo seguro, lo concreto y lo predecible .
Me veo renaciendo cuando salgo de los miedos, del apego, de la nostalgia.
Cuando renazco despido a los que viajan para siempre y los guardo en un lugar muy especial de mis afectos.
Construyo nuevos andamios con sólidas pero movibles estructuras y así doy forma a mi ser que sigue siendo imperfecto.
Pero que tiene esperanza.
Cuelgo de mi cazador de sueños viejos versos, intentando darle forma a los que quieren nacer en su lugar.
Renazco con mi arco y con mi flecha y apunto al futuro con la fuerza del amor y la pasión por crear.
Voy desarmando y armando certezas y convicciones, puntos de vista y opiniones.
Renacer es poder decir adiós sin que te duela…mirar hacia adelante y caminar ...
Es tender puentes para ir al encuentro de los otros.
También poder estar solo y sentirse bien acompañado.
Disfrutar los silencios y las melodías.
Compartir lo más bello y también lo más doloroso.
Es cantar aunque nadie nos oiga y escribir aunque nadie nos lea.
Y agradecer…y perdonar…y estar en paz…
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